Esta es la bendita oración del anima de Juan minero para atraer mucho dinero rápidamente. Esta plegaria es muy milagrosa ya que se la haremos al anima de juan minero quien conoció la dureza de la vida y el hambre. Si quieres atraer el dinero y la suerte a tu vida rápidamente haz esta oración como esta aquí. Repitiéndola asi un total de cinco días seguidas. Hazlo asi y deja que la abundancia llegue a tu vida. Comencemos
El dinero Llega a tu vida con este pedido a Don Juan Minero
¡Oh, bendita y piadosa
Ánima de Juan Minero,
espíritu trabajador que
conociste el esfuerzo y la
lucha en las entrañas de la
tierra! Hoy, con el corazón
en la mano y la necesidad
clavada en mi pecho, me
arrodillo ante ti, suplicante,
para implorar tu ayuda en
estos momentos de
oscuridad y desesperación.
Juan Minero, tú que en vida
fuiste fuerte y valiente, que
labraste tu destino con
sudor y sacrificio, escucha
el clamor de mi alma
afligida. Necesito tu auxilio
urgente, tu mano milagrosa
que abra las puertas de la
abundancia y la fortuna.
¡No aguanto más esta
pobreza que me ahoga,
estas deudas que me
persiguen como sombras
malditas! Por favor,
intercede por mí ante los
misteriosos caminos del
dinero rápido, haz que
llegue a mis manos sin
demora, que el sustento
no me falte y que la
prosperidad llene mi hogar.
¡Ánima santa de Juan
Minero, te pido con
lágrimas en los ojos! No me
abandones en esta hora
de angustia. Tú, que
conociste la dureza de la
vida, sabes lo que es sufrir
por un mendrugo de pan.
Ayúdame a ganar la lotería,
a que la suerte me sonría
aunque sea una sola vez.
Que los números sean
favorables, que la fortuna
me elija y que el premio
caiga en mis manos como
un milagro celestial.
¡No pido riquezas infinitas,
solo el alivio para mis
penas, la tranquilidad para mi
familia y la paz que tanto
anhelo! Juan Minero, espíritu
bondadoso, te prometo que si
me concedes esta gracia,
honraré tu nombre con fe
y gratitud. Llevaré tu
recuerdo en mi corazón y
compartiré mi bendición con
los más necesitados, para
que tu misericordia no sea en
vano. ¡No permitas que la
desesperación me gane, que
la miseria me derrumbe!
Dame una señal, abre los
caminos, haz que el dinero
llegue a mí como un río
que no se agota.
Confío en tu poder, en tu
bondad, en tu intercesión
divina. Sé que no me dejarás
caer en el abismo.
¡Con toda mi fe, con toda mi
alma, te invoco, ánima
milagrosa de Juan Minero!
Que así sea, por los siglos
de los siglos.
Amén.
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