Buenas noches a todos ¡ hoy te traigo una oración de mucho poder para lograr el amor de ese hombre y mujer que tanto deseas. Esta es la antigua oración del Justo Juez negro y deberás rezarla como en este video tres veces a la medianoche y después al mediodía, hazla asi y pronto veras a tu amor loco por Ti. comencemos
Oración del Justo Juez Negro para Amarrar a un Hombre o mujer
Le pido al Gran Espíritu que
elimine toda energía no armónica
de mi ser total, que las entidades
oscuras que me rodean o me
puedan ser enviadas, nunca me
alcancen, y sean entregadas a
la luz para que desde la Sabiduría
Superior, sean llevadas al lugar
del universo que les corresponda.
Que los malos deseos, las envidias
y los malos pensamientos que se
dirijan hacia mí de manera
consciente o inconsciente se
disuelvan en el camino
convirtiéndose en energía
de amor incondicional.
Pido que las energías oscuras,
los dispositivos oscuros y las
conexiones oscuras de mi ser total,
y también de mi hogar, de los
hermanitos animales que conviven
conmigo, de mis propiedades y de
todo lo que hay en kilómetros y
Kilómetros a mi alrededor sean
transmutadas y entregados
a la Luz .
Le pido a mi animal de poder
que localice y recupere las partes
de mi alma fragmentadas, que
las purifique, las sane y las
reintegre en el cuerpo
principal de mi alma.
Le pido a los Espíritus que me
asisten que me llenen y me
protejan con brillante Luz Divina,
y que reparen las grietas
energéticas de mi campo áurico
y el de las personas que me rodean.
Visualizo una columna de cálida
y amorosa Luz Divina, que viene
desde la Fuente llenando todo
mi cuerpo, limpiando y sanando
cada parte, cada célula
Justo juez negro, así como
amansaste al mancebo
quiero que me amanses a
(diga el nombre de la persona)
no lo dejes en silla, en cama,
ni con mujer, que no tenga
un rato de tranquilidad,
Justo Juez Negro,
así como conduciste las cuatro
mil almas del purgatorio, quiero
que me conduzcas a
(diga el nombre de la persona),
si está durmiendo no le dejes
tranquilidad, su cama llénala de
abrojos y su almohada llénala
de piedras.
Atormentarlo, no lo dejes dormir,
arroja todos las almas penantes
sobre el, que ni despierto ni dormido
deje de pensar en mí,
no lo dejes tranquilo,
quiero que me ates a
(diga el nombre de la persona);
en reuniones tranquilidad no tenga,
hasta que a mí esté unido
por completo, todo esto te lo
pagaré con rezártelas 3 veces a
las doce de la noche
y a las doce del día.
Asi sera
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